Con este set, ¡caerán de rodillos los porcos y los hombres fáciles! Difícil de resistir a esas orejas de puerkaza y a esa simpática colita en forma de espiral… ¡Y ni hablar del anillo que huele a un buen embutido casero! Un atuendo ocasional para farmear al Dragocerdo, pero que dejará boquiabiertos a los invitados en una fiesta común y corriente.